miércoles, abril 30, 2008

In memoriam


Esta es la canción de las noches perdidas
que se canta al filo de la madrugada
con el aguardiente de la despedida,
por eso suena tan desesperada.


Ven a la canción de las noches perdidas
si sabes que todo sabe a casi nada,
a carrera en los leotardos de la vida,
a bola de alcanfor dormida en la almohada…

Y tiene nombre de mujer,
como la soledad, como el consuelo,
los fugitivos del deber
no encuentran taxi libre para el cielo.

Esta es la canción de las noches perdidas,
lleva un crisantemo ajado en la solapa,
se sube a la cabeza como ciertas bebidas,
se pega a la desilusión como una lapa,
canta la canción de las noches perdidas,
quema como el gas azul de los mecheros,
sirve para echar vinagre en las heridas,
miente, como mienten todos los boleros.

Y tiene nombre de mujer,
como mi corazón, como tu olvido,
los fugitivos del deber
no tienen más amor que el que han perdido.

Esta es la canción de las noches perdidas,
si quieres te la cambio por un rato en tu cama,
hierve como el ruedo en tardes de corrida,
va como los besos en los telegramas.

Y tiene nombre de mujer,
como la libertad, como la nieve,
los fugitivos del deber
cogen su maldición y se la beben.

viernes, abril 11, 2008

Sustancia primaveral


Apenas amanece y tu cuerpo vibra; el sol acaricia
El contorno de tu hombro, la cuna de tu cintura, de la cadera tu cadencia
Mis manos al unísono rozan tu piel, tu pelo, tu deseo
Acaricio la idea de tu sonrisa en éxtasis. Igual me veo.

Son tus formas la perfecta horma de mi cuerpo
Se amolda a tus fantasías, a las propias de este tiempo
De esta estación del año que de antaño tu silueta atrapo
Primero en sueños, después en primaveral suceso de cuerpo a cuerpo.

Tus dedos recorren mi torso, el trozo de mi hipotálamo
Que con verte se convierte todo sueño en constante orgasmo
Anuncia tu silueta la feliz agonía de gozar cada vez un momento
De tu olor, tu sabor, tu piel… esa contorsión corporal que tanto amo.

Condenarro’08