Me encuentro sentado entre estas cuatro paredes, mis brazos estan cubiertos de una sustancia biscosa roja carmesi con el tiempo se va poniendo poco a poco negra. Si me preguntas si me dolio, si asi es lo senti pero estoy acostumbrdo me he infligido tanto dolor, ahora las pastillas y el alcohol han ayudado a adormecer un poco este dolor; cuando me corte no lo se, los ojos se me cierran poco a poco no pienso en nadie solo en la oscuridad cada vez mas cercana.
No se por que duele dejar esta vida no lo entiendo en verdad tengo miedo; miles de voces escucho dentro de mi cabeza y se atreviesan en mi cerebro miles de ideas hay un caos enorme dentro de mi el dolor es intenso no importa que haga ya. Se acaba mi vida no importa que haga o deje de hacer.
Me pregunto si ame; ame y con tanta pasion que me duele recordar, que importa el destino debe proseguir, rio y veo desde aquella ventanilla aquellos que con gritos desesperados me llaman pidiendo que destrabe la puerta se oyen golpes tratando de romper esa pequeña ventana que me divide de sus ataduras y maltratos, ironia del destino ahora son ellos los desesperados por entrar, yo nunca quise llegar a esto pero mi enferma mente me guio al suicidio, sera que la tenia retorcida o en verdad la sociedad hizo que se me retorciera, aun recuerdo yo parado fuera de esta casa de locos, esperando una iluminacion y todos los que pasaban me decian loco, si lo estoy debo ingresar y buscar esa cura tan milagrosa pero no era una cura que buscaba, no buscaba nada fuera de lo normal, ni la sociedad ni los demas si no la misma incorformidad de mis ideas me llevo a este caos que esta en sus ultimas consecuencias, se siente frio al morir y cerrar los ojos si se siente y mucho antes de hacerlo, que risa me da ver esa desesperacion que se ve en ellos, tanto caos por alguien quien siempre espero la redencion.
Podemos tratar de explicar el amor:
